MOJÁCAR: “Ya tenemos camaleones en la Comarca”

MOJÁCAR:
“Ya tenemos camaleones en la Comarca”

SERBAL: (Sociedad para el Estudio y Recuperación de la Biodiversidad Almeriense)

El camaleón común (Chamaeleo chamaeleon) ha experimentado en las últimas décadas una notable expansión en la provincia de Almería, ampliando considerablemente las áreas ocupadas por la especie y presentando en algunos sitios densidades bastante altas. Cada día son más frecuentes los encuentros entre las personas y estos singulares lagartos arborícolas. Actualmente se extiende en toda la franja costera almeriense desde Adra hasta Mojácar; también ya se encuentra también en las solanas de la Sierra de Gádor y gran parte de la ribera del río Andarax. A nuestra Comarca no hace mucho que han llegado y lo han hecho por su gran capacidad de adaptación al medio, siendo capaces de ocupar una gran variedad de hábitats, desde ramblas naturales, solares, escombreras periurbanas y urbanas, pasando por todo tipo de cultivos o jardines.
• ¿Debemos mover al animal del lugar donde se encuentra?
La respuesta tajante es ¡NO! Cuando encontremos un camaleón, no debemos suponer que el camaleón no está “en su sitio” solo porque el lugar nos parezca poco adecuado o porque no hayamos visto antes camaleones en la zona, pues es proverbial la capacidad de estos reptiles para camuflarse y pasar inadvertidos. Como regla general, deberemos suponer que el camaleón vive allí y lo mejor será dejarlo donde está.

Si está cruzando una carretera y corre peligro de ser atropellado, lo apartaremos de la calzada dejándolo en el lado de la carretera hacia el que se dirigía. Si se ve amenazado por un perro o gato, lo colocaremos en alguna rama de algún arbusto o árbol cercano, fuera de su alcance. Pero lo dejaremos donde lo hemos encontrado, que casi con toda seguridad será su territorio.

La mayoría de encuentros con camaleones se producen entre julio y octubre, durante el periodo reproductor de estos animales, momento en el que se hacen más visibles.
Los camaleones son lagartos arborícoras que pasan la mayor parte de sus vidas ocultos en las ramas de la vegetación de porte arbustivo o arbóreo. Solo en dos momentos de sus vidas abandonan la seguridad que les ofrecen las ramas de los árboles y se aventuran a bajar al suelo. El primero es cuando los machos en celo van a buscar hembras o las cotejan. El segundo, cuando las hembras grávidas, con la barriga dilatada por los huevos que portan en su interior, se desplazan en busca de zonas de terreno suelto o arenoso adecuadas para excavar las madrigueras que le servirán de nido para enterrar sus huevos.

Es durante estos desplazamientos cuando es más probable que sean observados por la gente. Si “rescatamos” al camaleón, puede que, lejos de ayudarle, estemos impidiendo que un macho acceda a su hembra, o haciendo que una hembra cargada de huevos no consiga llegar a la zona donde debe excavar el nido. Al liberarlo en otra zona, si allí no hay camaleones, lo condenamos a la soledad o a un hábitat no adecuado, y si hay camaleones, dado que son animales fuertemente territoriales, lo exponemos a ser agredido violentamente por los camaleones residentes. Estamos realizando por tanto una traslación con consecuencias impredecibles.

“Traslocar un animal es moverlo del lugar donde naturalmente se encontraba a otro distinto, es decir, capturarlo, llevarlo a otro lugar y dejarlo allí. Esta acción que podría parecer irrelevante, tiene sin embargo unas profundas y serias implicaciones en cuanto a la supervivencia del animal, el bienestar de las poblaciones (desde las cuales se trasloca al animal y también a las que llega el animal traslocado) y la conservación de la herpetofauna en general. Existen ya numerosos estudios científicos sobre los impactos de la traslocación en reptiles y anfibios. Se considera que la traslocación presenta efectos negativos a corto y largo plazo.

Tan solo en el caso de que resulte muy obvio que el camaleón se encuentre en un lugar donde su presencia solo pueda explicarse porque alguien ya lo ha traslocado, o como consecuencia de un escape o suelta, como por ejemplo en el interior de un edificio o en el centro de una ciudad, lejos de parque o zonas arboladas, podemos ponernos en contacto con alguna de las siguientes entidades:
• CREA de Almería
Teléfono 670.944.592
• SEPRONA: Teléfono 062
• Delegación Territorial de Medio Ambiente.
Teléfonos 950.101.676 y 671591912

• Cuerpo Nacional de Policía adscrito a la Junta de Andalucía 950.005.710
quienes pasarán a recogerlo.

No está demás recordar que el camaleón está protegido por la ley y que si lo capturamos o molestamos nos exponemos a una multa.

Es importante pues, que si encontramos uno de estos preciosos animales, anotemos el lugar exacto de su ubicación, fecha y hora, y cualquier dato de interés, como si está sobre una planta, de que tipo, o si está andando por el suelo, cruzando una carretera…, y enviar los datos, si es posible acompañados de una fotografía al correo info@serbal-almeria.com, para que podamos añadir la cita a la base de datos. Así conoceremos cada vez mejor a esta especie animal y su distribución y estado de conservación en nuestra provincia.

Juan Sánchez-DICIEMBRE-2.016